Nunca volveremos a ser los mismos
Y está bien
Hoy esto va a ser breve. Hace poco más de un mes, escribía en una de estas cartas sobre el concepto de “estar lista”, que es algo que durante este año ha rondado mucho mis pensamientos.
Mi cabeza sigue dándole vueltas al tema de estar lista y de los timings. Todo está cambiando muy rápido este año. Yo estoy cambiando muy rápido. Y eso me ha hecho reflexionar al respecto de lo ya escrito.
En uno de los párrafos apunté: Hay algunas veces en las que el timing no juega a nuestro favor. Simplemente no es el momento. Pero si el momento no es ahora ¿puede serlo luego? La verdad es que no lo sé. No tengo respuesta para esto.
Ahora sí que tengo la respuesta. De hecho, varias.
El timing siempre juega a nuestro favor. Vale, esto puede sonar un poco hocus pocus, lo reconozco. Pero creo que siempre está a nuestro favor en tanto a que nos suceden cosas según lo que nos permitimos y aceptamos (tanto las cosas buenas como las malas -si es que hay cosas malas-). Todo depende de cuánto estemos dispuestos a evolucionar y a salir de nuestra zona de confort.
Respecto a lo de “si el momento no es ahora ¿puede serlo luego?” La respuesta es no. Esto necesita explicación.
Lo que podría ser ahora, no será luego porque luego ya será otra cosa. Nunca se darán las mismas condiciones, nunca volveremos a ser los mismos. Por tanto será ya otra cosa. Y está bien.
Lo que no es, no es porque hay que dejar espacio para lo que sí.
PD: Esta semana volví a “Tierra de campos”, un libro de David Trueba que leí a principio de año. Algo me decía que lo visitara de nuevo y que mirara lo subrayado. Y como todo lo que es revisitado, algunos aspectos siguen igual, pero muchos se ven y se sienten diferentes. El libro en ese momento me hablaba de algo muy concreto y ahora de otras cosas. Así que dejo por aquí algunas frases que llamaron mi atención.
Hay que saber entrar y hay que saber salir, en eso el escenario se parece a la vida.
Hay pasado en la imaginación, que a veces es un proyector de experiencias vividas.
Es difícil organizar la vida, pero la vida a veces se organiza sola para ti de una manera delicada, con una lógica que asusta, tan perfecta que es emocionante.
*Esta soy yo este año. Gracias por leer. Un besito.